Arts and Crafts Motomura

 Fundado en 1953 por el artesano Munemutsu Motomura, el atelier Arts and Crafts Motomura ha creado numerosos artefactos fascinantes y originales durante tres generaciones, incluyendo joyas de esmalte, trabajos en metal.

  Basándose en su gran experiencia y habilidad artesanal, el fundador Munemutsu Motomura escribió el primer manual completo de esmaltado de metales de Japón en 1882. Su "Enciclopedia del esmalte metálico" fue aclamada como una guía completa y fiable que ayudaría sin duda a todos los aspirantes a aprender, desde los aficionados hasta los profesionales, y ganó un premio de publicación cultural el año siguiente.

  En 2004, su repentina muerte llevó al atelier al borde del cierre, pero su hija Mutsumi Kufukihara y su nieta Tae Kufukihara se esforzaron por mantenerlo, haciendo denodados esfuerzos por mejorar sus habilidades y gustos.


Apoyado y amado por la gente que ama la belleza y la originalidad, Arts and Crafts Motomura ofrece siempre ingeniosos accesorios y trabajos en metal desde la ciudad de Kagoshima, en el sur de Japón.

El artista de la joyería Tae Kufukihara

  Nacida y criada cerca de Tokio, en Japón, Tae Kufukihara ha sido aficionada a las artes y la artesanía desde su infancia. Cuando tenía 18 años, decidió ingresar en la Universidad de Kagoshima, con la profunda aspiración de aprender esmaltado y trabajo en metal de su abuelo Munemutsu Motomura. Pero desgraciadamente, justo antes de conocer su aceptación en la universidad, Munemutsu falleció repentinamente.

 Abandonada a la desesperada durante un tiempo, se esforzó por levantarse y reanudar el taller con su madre, aprendiendo esmaltado de metales de su abuela Sachiko y de los aprendices de Munemutsu. Cuanto más aprendía, más se fascinaba con los bellos colores y el brillo propios del esmaltado de metales combinados con el lustre metálico.

 Sus serios esfuerzos por abrir nuevos horizontes en el esmaltado de metales diferentes al cloisonné tradicional japonés la llevaron a un encuentro con un destacado joyero de esmaltes, Kunio Nakajima. Él ayudó a Tae a salir del atolladero de dónde ir. Nakajima le presentó al mejor joyero, Osamu Shudo, y ella empezó a aprender a hacer joyas desde cero.

 Un año más tarde, Tae lanzó su marca original Tae K. Bajo esta marca integró sus conocimientos adquiridos en el trabajo del metal y la fabricación de joyas para producir sus originales accesorios.
 Ahora se la considera una prometedora artista de la joyería llena de originalidad e ingenio.